sábado, 31 de marzo de 2012
El ambiente en el trabajo
Un buen ambiente laboral, ayuda a la productividad y la prosperidad de la empresa. Pero hay muchos empresarios que piensan lo contrario, cuanto más diferencias cree entre su personal, y envidias, este se comportara de manera más agresiva, para ser mejor que el compañero, y producen más. Pensar en crear mal ambiente, para funcionar y manipular de mejor manera al personal, es muy peligroso, el malestar puede llegar hasta tal punto, que la viabilidad de la empresa sea imposible. El mundo de la empresa ha cambiado, ya no funcionan métodos carcas, la gente gusta de trabajar con un buen ambiente, pues ni produce, ni es creativa, en estados hostiles, y tiende a rendir menos, y a cambiar más fácil de empleo. El empleado sin cargas familiares, puede elegir más facilmente el empleo que quiera, por lo que son cada vez menos apreciados por estas empresas de tecnicas obsoletas, de ahí que los jóvenes encuentren menos puestos de trabajo, no se dejan someter a practicas abusivas por parte del empresario. Es más cómodo contratar empleados de otros países donde la moneda es de inferior valor, y que suelen tener cargas familiares, que se interesan por cualquier empleo que satisfaga sus necesidades económicas sin tener en cuenta las condiciones laborales. Por lo que se tiende a formar a estar personas en sus lugares de origen, para después utilizar esta mano de obra más barata. Sabiendo esto ya sabemos a lo que nos enfrentamos, acepta el trabajo pues, otro, ya esta dispuesto a tomarlo, el trabajo escasea por que así lo han querido. Es más fácil crear una empresa, de esta manera cuya cualificaciones son más fáciles de conseguir. Pensar en soluciones, es que hay que trabajar mucho para poder competir, ya no es tan facil buscarse la vida, y tenemos que reinventarnos. No podemos elegir, pero somos libres para luchar por lo que queremos, es difícil, pero las salidas hay que buscarlas en nosotros mismos, la solución cada vez se encuentra en que nos solucionen nuestros problemas, la solución, está en estar más preparados que los demás para competir y ser mejores. Formación, formación y formación. Aprender a vivir y a consumir, lo que realmente necesitamos, a no dejarnos manejar por ese consumo que viene de personas que están explotadas, si hacemos un consumo responsable, y consumimos de empresas que respetan la integridad del ser humano, haremos un mundo mejor. Es nuestra forma de consumir la que nos condena a una vida de esclavos.
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