domingo, 13 de noviembre de 2011

Falta de Atención

Un despiste lo tiene cualquiera, es humano, pero la falta de atención es imperdonable. Es necesario disciplina para poder cultivar la atención, poner atención a lo que estamos haciendo es de justa necesidad, las distracciones sin justificación después pasan factura. Poner atención nos facilita las cosas, pero no solo al profesional, sino también al cliente. Estar centrados  en lo que nos traemos entremanos sin distraernos en el camino, ahorra tiempo y disgustos. La relajación se produce  cuando un exceso de trabajo, nos deja tan satisfechos, y cansados que somos incapaces de centrarnos, por eso los descansos y delegar funciones es una de las tareas más importantes, que hay que saber realizar.